Desde mi balcón
Amar. ¡Qué bonito y qué raro es amar! Y la atracción. ¡Qué rara que es la atracción! ¿Y quién es capaz de controlarla? No controlamos a quién amamos y quién nos atrae. Alguien del vecindario, del trabajo, del colegio, de nuestro bar favorito o del ritual diario del supermercado.
Y, algunas veces, preferimos, sea por el motivo que sea, que ese "amor" se convierta en algo individual. Quizá no es la persona adecuada, el momento correcto o porque nuestro corazón ya "debería" estar ocupado. Y entonces vivimos una de las historias que el amor nos ofrece. La que se vive tras el balcón que separa a las emociones del mundo exterior. De todo el mundo exterior.Dispones de subtítulos en castellano y en otros idiomas (de momento, inglés.. con ayuda de un traductor).
Si quieres colaborar conmigo para traducirlas mejor o traducirlas a otro idioma, no dudes en mandarme un mensaje.